¿Cuándo se quita la calefacción central?

El plazo para adaptar la calefacción central de un edificio termina en mayo de 2023, justo dentro de un año. Antes de esta fecha, los edificios que cuenten con calefacción central deben adaptarse a la nueva normativa.

Las comunidades con calefacción central deberán disponer de un contador individualizado para cada propietario, lo que le supondrá un ahorro medio del 24% y aumentará la eficiencia energética en un 20%.

¿Es obligatoria la adaptación de la caldera central?

Hay que tener en cuenta que la ley dice “siempre que sea técnicamente viable y económicamente rentable”. Pero ¿a qué se refiere exactamente con esta especificación?

La adaptación del sistema debe ser “rentable”, lo que significa que el ahorro estimado frente a la inversión debe amortizarse en un plazo inferior a cuatro años. Si no es así, la comunidad puede decidir no hacerla. Si es así, la empresa instaladora debe realizar un certificado en que se informe de la falta de rentabilidad de la misma.

¿Se puede instalar un contador individual?

Si existe alguna dificultad para instalar un contador individual, se puede optar por un repartidor de costes para medir el consumo de cada vivienda. En este segundo caso, el aparato realiza una estimación de costes por vivienda.

Aproximadamente el 40% de las viviendas pueden realizar la instalación de un contador, ya que disponen de una instalación en anillo. Es decir, disponen de una única entrada de agua caliente en la vivienda. El 70% restante disponen de una instalación en columna, por la cual todos los radiadores de distintos pisos están unidos entre sí. En ese caso, la solución es instalar un aparato de medición en cada radiador.

Recuerda que quien mejor puede informarte sobre las posibilidades de la vivienda es un instalador autorizado.